viernes, 23 de enero de 2009

Voilà

Hola amigos. Aquí me encuentro de nuevo, esta vez, como ya sabéis, en una ciudad que no tiene desperdicio. Hablamos de París, archiconocida por todos. No hace falta hablar de todo lo que esconde esta preciosa y mítica ciudad. Todos sus rincones, sus calles, su aroma bohemio; así como sus monumentos, iglesias, parajes naturales, etc. Una ciudad donde verdaderamente vale la pena perderse por un tiempo, y cuánto más largo mejor, para poder disfrutar de todo al 100%.
Que contar de París que no se sepa. Que encontrar en París que no se haya visto. En este relato de mi viaje, intentaré repartir bien la dosis de espectacularidad de la ciudad.
En lo que se refiere a edificios religiosos, no se puede dejar de mencionar la Catedral de Notre-Dame, monumento gótico reconocido mundialmente por todos, objeto de la película de Walt Disney "El jorobado de Notre-Dame", y famosa también por sus gárgolas situadas en lo alto de la Catedral y que se encargan de controlar a la ciudad.













Otro de los edificios religiosos que no nos podemos perder es la Basílica del Sacré Coeur, situada en la colina de Montmartre. Se trata de dun monumento precioso que combina los estilos romano y bizantino. Gracias a su ubicación y controversia, se trata de uno de los lugares más visitados de París.


Antes de terminar mi visita por hoy, no pude dejar de visitar uno de los museos más conocidos en todo el mundo, por su grandeza, espectacularidad y por su gran inmensidad de obras de gran valor. Se trata del Louvre, el museo más visitado de todo el mundo, y que cuenta con un número aproximado de 300.000 obras de diferentes épocas y civilizaciones. De su exterior cabed estacar la pirámide de cristal que sirve de entrada al museo.



Bueno amigos, de momento esto es todo por mi parte. Pero el viaje no ha terminado aquí, así que nos vemos muy pronto compañeros...

miércoles, 21 de enero de 2009

La partie par tout

Oh la la, mon amour. Hola amigos autoestopistas. Perdonad mi atrevimiento en hablaros en otro idioma, pero es que el lugar lo merece. Asi que supongo que no hace falta que os diga dónde me encuentro. Bueno, para los más despistados, os lo diré. Mis pies me han llevado hasta la ciudad del amor, París, conocida por todos, aunque no descubierta por la mayoría. No os perdáis ni un solo detalle de lo que pase por aquí estos días, que de verdad, merece la pena.
Os dejo con nuestro reto semanal, que esta vez es muy facil, así que, a ver si participáis y acertáis de una vez. Hasta pronto...



domingo, 18 de enero de 2009

Más Dubai

Bueno viajeros, en esta aparición os acabaré de contar todo lo que os pueda interesar de Dubai. Tengo que deciros que es un destino difícil de explorar a pie, ya que muchos de sus puntos de interés como Deira o la playa de Jumeirah se sitúan a gran distancia unos de otros. Por ello os deberéis de buscar un medio de transporte que se adecúe a vuestras necesidades.


Eso sí autoestopistas, la visita al centro de la ciudad se divide en dos zonas de interés: Deira, al norte de la cala, y Bur Dubai, al sur. Deira, en la orilla derecha de la vía fluvial, representa el corazón comercial y financiero de la ciudad y también alberga las mejores tiendas. Aquí se encuentran varios zocos, entre los que destaca el zoco de las especias, el zoco viejo de Deira y el zoco cubierto de Dubai. Deira es también la parte más ambientada de Dubai y en sus calles se puede sentir la frenética actividad comercial, que contrasta con la calma y el orden que reinan en el resto de la ciudad.

La zona histórica de Bur Dubai, sin embargo, tiene menos bullicio pero alberga algunos lugares de interés turístico como el Museo de Dubai, la Gran Mezquita y la Casa de Sheikh Saeed Al-Maktoum.La cala de Dubai también os puede resultar de interés viajeros; se puede cruzar en una de las embarcaciones tradicionales (el dhow) o simplemente caminar por sus orillas a lo largo del paseo de Bur Dubai. Al oeste de la cala se encuentra la Playa de Jumeirah, que en realidad no es una playa como tal, sino una amplia extensión de arena rodeada por las cálidas aguas del Golfo Pérsico. Gran parte de esta extensión pertenece en la actualidad a los hoteles privados que están proliferando por la zona, aunque una vez en la arena hay pocos obstáculos para pasear libremente por donde se quiera. Mucho de los mejores hoteles de la ciudad se encuentran en dicha playa y uno de los más importantes es la inconfundible mole del Burj al Arab.

Por cierto autoestopistas, también lugares para el ocio como el parque acuático Wild Wadi Water Park o atracciones más tradicionales como la Mezquita de Jumeirah, que es considerada por muchos como la más bella de Dubai, y que merece la pena visitar.

Yo ya me despido de este lugar de lujo y derroche, pero a vosotros viajeros, espero veros pronto...